“No duda en depilar todo el cuerpo, pintarle las uñas y despojarle de un tatuaje para que no pudieran identificar el cadáver en caso de ser encontrado y, de esta manera, si las partes del difunto se descubrían lo asociarían a una mujer y no a un hombre”.

Envenenamientos, descuartizamientos, suicidios, ruidos extraños, fantasmas, verdugos, ruidos inexplicables, rapto de cadáveres, manos abandonadas, torturas infinitas, mujeres enterradas en vida, niños exiliados, manicomios y espionaje. Todo ello es lo que encontrará el lector en cada una de las páginas de este libro. Sucesos ocurridos en las mismas calles por las que valencianos y visitantes circulamos absortos en nuestros asuntos día tras día. Lugares emblemáticos de la ciudad de Valencia o pasajes más escondidos de la misma ciudad. Algunos de ellos continúan intactos, otros muestran el inexorable paso del tiempo, pero todos ellos comparten una misma particularidad: “todos fueron testigos de hechos verdaderos”.